Otra forma de comprar vivienda
Si desea invertir en vivienda y no dispone de todo el dinero, recuerde que existe la modalidad llamada leasing habitacional, que funciona muy similar a un préstamo con una entidad bancaria. La diferencia radica en que en el leasing el inmueble queda a nombre del banco, mientras que en el crédito hipotecario la propiedad está a nombre del cliente, pero con hipoteca al banco.
El leasing habitacional es un sistema de financiación de vivienda a través de un contrato de arrendamiento con la entidad bancaria. En ella, el cliente paga al dueño del inmueble la cuota inicial, que es el 20% de su valor total, en tanto que el banco le presta el 80% restante.
Para esta modalidad existen diferentes opciones de compra de la casa o apartamento, que van desde el 0 % hasta el 30 % del valor del crédito. Este valor se pacta para ser pagado junto con la última cuota del crédito, pero puede ser cancelado en cualquier momento sin ninguna penalización.
Por ejemplo, en un apartamento que cueste $100 millones, una vez el usuario pague al propietario la cuota inicial, que serían $20 millones, puede negociar con el banco el pago de los $80 millones que faltan.
Si eligió pagar el 30%, entonces, al final del negocio o en cualquier momento debe pagar $24 millones, mientras que los $56 millones restantes los divide entre el número de cuotas mensuales, según el plazo que haya escogido para el leasing, que puede ser mínimo de 10 años y máximo de 20 años, pudiéndose prepagar en cualquier momento sin penalidades. A este valor mensual se le suma la cuota del seguro y el interés del crédito.
En relación con las tasas de interés, estas varían de acuerdo a las políticas de cada banco.
Esta modalidad de crédito aplica solamente para viviendas mayores a VIS (Viviendas de Interés Social ) ya sean nuevas o usadas y las opciones son UVR o pesos.
En esta modalidad la propiedad del inmueble queda a nombre del banco, pero es responsabilidad del cliente quien toma el crédito asumir las obligaciones correspondientes a servicios públicos, administración e impuestos del inmueble.
Ventajas. Es inembargable, por temas de seguridad para los clientes no aparece el inmueble a su nombre. Reducción de la base gravable a través del Impuesto de Renta. Por lo regular en la mayoría de las entidades financieras, la tasa de financiación es menor a la del crédito hipotecario.
En el leasing habitacional, contrario a lo que sucede con vehículo o maquinaria, el cliente no tiene opción de devolver al banco el inmueble. Pero sí puede cederlo a otra persona.